Omega 3 en el embarazo
Impacto de la ingesta de ácidos grasos poliinsaturados n-3 en el embarazo en la salud materna y los resultados del parto: revisión sistemática y metanálisis a partir de rastros controlados aleatorios
El consumo materno de omega-3 durante el embarazo se ha relacionado positivamente con un impacto positivo en la salud materna y el crecimiento fetal. Sin embargo, los resultados de los estudios individuales son inconsistentes y contradictorios.
Objetivo
Examinar el efecto de la suplementación con DHA, y / o EPA, y / o ALA durante todo el embarazo en el crecimiento de la descendencia y los resultados del embarazo.
Diseño
Una revisión sistemática y meta-análisis.
Población
Mujeres embarazadas.
Métodos
De acuerdo con la declaración (PRISMA) y las directrices del Manual Cochrane. Se incluyeron ensayos en humanos (ECA o cuasialeatorios) que incluyeron la administración oral de suplementos de omega-3 al menos dos veces por semana durante el embarazo y se compararon con los grupos de control sin administración de suplementos o placebo. Los datos fueron extraídos y dirigidos utilizando el software RevMan. Cincuenta y nueve ensayos controlados aleatorios fueron elegibles para su inclusión en el metanálisis. Realizado en MEDLINE, PubMed, Scopus, Google Scholar y la Biblioteca Cochrane comparando omega 3 con grupos de control, desde 1990 hasta 2020.
Las principales medidas de resultado
Las medidas de resultado primarias fueron hipertensión inducida por el embarazo, preeclampsia, duración gestacional, parto prematuro, parto prematuro prematuro, peso al nacer, bajo peso al nacer, longitud neonatal y circunferencia de la cabeza. Los resultados secundarios fueron la unidad de cuidados intensivos neonatales, la muerte infantil, la muerte prenatal y la cesárea.
Resultados
En 24 comparaciones (21.919 mujeres) los ácidos grasos n-3 desempeñaron un papel protector contra el riesgo de preeclampsia (RR = 0,84; IC del 95%: 0,74–0,96 p = 0,008; Yo2 = 24%). En 46 comparaciones (16.254 mujeres) los ácidos grasos n-3 se asociaron con una duración significativamente mayor del embarazo (DM = 1,35, IC del 95%: 0,65–2,05; p = 0,0002; Yo2 = 59%). 27 comparaciones (15.510 mujeres) se acompañaron de una disminución significativa en el parto prematuro de menos de 37 semanas (RR = 0,86; IC del 95%: 0,77–0,95; p = 0,005; Yo2 = 0%). 12 comparaciones (11 774 mujeres) se acompañaron de una disminución significativa en el parto prematuro prematuro de menos de 34 semanas (RR = 0,77; IC del 95%: 0,63–0,95; p = 0,01; Yo2 = 40%). 38 comparaciones (16.505 lactantes) tuvieron un aumento significativo en el peso al nacer (DM = 49,19; IC del 95%: 28,47–69,91, p < 0,00001; Yo2 = 100%). Finalmente, 14 comparaciones (8.449 lactantes) tuvieron una significación límite en el aumento del bajo peso al nacer (RR = 0,88; IC del 95%: 0,78–1,00, p = 0,05; Yo2 = 28%).
Conclusiones
La suplementación con omega-3 en el embarazo puede prevenir la preeclampsia, aumentar la duración gestacional, aumentar el peso al nacer y disminuir el riesgo de bajo peso al nacer y parto prematuro.
